DESALIENTO
MDH Ramón Larrañaga Torróntegui
A veces se pregunto ¿Cuántas personas realmente le amaron? Muchas le gustaron, otras con solo mirarlas se sentía enamorado de ellas ¿Cuánto tiempo le invirtió a esas relaciones? ¿Perdió ese tiempo? Reflexionar en ese pasado, se necesita aún estando contento, tranquilo o estar cerca de la felicidad, concebirse satisfecho. Ser agradecido con cada una de esas personas por la atención prestada, tiempo entregado. Se dice ¿Encontré lo que perseguía en ellas?, ¿las ame? ¿Solo las use? para obtener lo que deseaba ¿Lastime, me rendí, llene de esperanza y no cumplí?
Cuando el amor se va y los años pasan, podrás volver al lugar en donde lo disfrutaste, pero jamás volverá el momento. Encontraras a la persona amada por las calles, en algún lugar común pero nunca se repetirá el instante. Lo que sientes se va quedando atrás atrapado entre la bruma de los recuerdos agradables. Miras a las espaldas y ocasionalmente lamentas el haberlo perdido y, olvidas al otro día. La decisión en cosas de amor es compleja, oportuna, suceden, se van, hace que con los años se cure y olvide. Lo hecho esta, no hay nada que restaurar.
Cuando se pierde la relación, es poco lo que queda por ese vacío que falta llenar y la persona se abandona, pierde la confianza, le da miedo el perderla para siempre, siente que la necesita pero no encuentra que hacer, su humor cambia. Valora la acción al verse sin ese campo tranquilo que proporciona el amor. Considera haber sido engañado y pregona que jamás perdonara, pero se engaña y difunde entre quienes lo rodean en su propia defensa argumentos desgastante en contra de la amada.
Es difícil el aceptar por eso anda de mal humor, no sabe qué hacer. Perdió y con ello su fuerza de lucha. Es momento en sentirse atrapado sin apoyo, negado en su amor, incapaz en sobre vivir.- Se ha ido porque ya no le importa, encontró otro nido, la ha dejado sola con su dolor de cabeza. La persona que ama, no escucha a otros sino a su amor, está de acuerdo, lo valora en su verdad, sabe lo que tiene y hasta dónde puede llegar.
Duele ser abandonada, arruinada, lastimada, sabe que ama y no acepta el rechazo infringido. Es molesto el pensar que ya no regresara pero es lo único en lo que recapacita. Se siente dolida, usada. Todo está bien hasta que aparece el odio. ¿Por qué brota el odio? La verdad es que son pocas las personas que realmente aman en profundidad de sentimientos por eso las relaciones son un desastre, se echan culpas, se cae en el error y se ama con dolor. Es una experiencia en la que a todos nos toca diferente baile y unos se comentan muy felices, otros no.
El final en toda relación se termina juzgando, culpando, lastimando solo porque no se alcanza a ver lo que se esperaba, lo que se comparaba con lo deseado. Esa sensación de vacío causa dolor, frustra, responde con disgusto a la sola mención del nombre de a quien se amo. Afirmamos que amamos pero no se confía, se ignora las necesidades de la pareja, se habla mal ante las amistades.- Esto, disgusta, tensa, frustra y llega la contestación nada agradable.- A toda acción, hay una reacción.
Si, tratáramos de atender y dejar en comparar, pensar mal, disgustar por capricho, lastimar por sensación placentera se viviría tranquilo. Se debe amar la relación desde el fondo del alma y no solo pedir que se le quiera, le den atención. Aprender a caminar juntos, cada cual haciendo su parte siendo indiferente a las envidias, apreciando lo que se tiene. Recordar que lastimar es una herida que se trae desde antes de la relación, lo mismo el miedo en amar y pensar que no somos amados en igual proporción.
Quien ama, aprecia lo bueno y lo malo, se enfrenta a los miedos, intenta suprimir los enojos para que no exista guerra por sus temores. El pelear, no es parte del amor, sino de las heridas, cicatrices que en muchas ocasiones no vuelven a sanar el sentimiento herido. El hecho es que una persona asustada, débil sin confianza en sí misma, no sabe amar en plenitud al sentirse siempre vacía, sola, frágil con miedo.
La persona plena sigue lo que quiere, aprovecha el momento que la vida le ofrece, escucha a sus sentimientos, cree en ella y se centra en esa persona con la que lleva su relación porque sabe que el ama, es lo que andaba buscando. No, es que el amor sea ciego, hay cosas buenas que hacen surja el que seamos vistos y que ese alguien nos ame. Su principio es la honradez, ser honesto, digno para que se merezca ser amado.