Por J.Humberto Cossío R.
Heriberto Galindo es un político de corte nacional que se prende y apaga como los focos que conocemos, pero que jamás se funde.
Se apaga cuando él quiere y se prende igual.
Hasta hace unos meses, encerrado en sus meditaciones cristianas no lo sacábamos de las mismas declaraciones, que sonaban a las de un monje dedicado al servicio del señor y sin interferencias mundanas.
Pero también nuestro Dios nos puede obligar al regreso a lo terrenal, y así parece ser la indicación divina que Heriberto ha recibido desde las alturas celestiales.
Ya protestó como integrante del Consejo Político Nacional del PRI.El próximo viernes será uno de los que decidirán la manera y forma de elección de Presidente de la República, Senadores y Diputados federales.
No tengo la menor duda, que la manera será por Asamblea o Convención de Delegados y por esta ocasión, olvídense de abrir el proceso y consultar a las bases y simpatizantes. El último que fue elegido en esta forma fue Roberto Madrazo, y al PRI le fue como en feria con un desastroso resultado.
No hay dinero para llevar a cabo este proceso.
El PRI quedó sin fondos, al ceder para la causa noble de la reconstrucción de las zonas afectadas por los sismos, lo que en derecho le correspondía para este año y sería otra de las causas fundamentales para no pensar en procesos, que desgastan al partido y causan rasgaduras que ni el mejor sastre político es capaz de remendar.
La unidad se hará presente y nuestro amigo Heriberto será parte de esa historia.
En su momento, hasta puede recibir su premio envuelto en candidatura Pluri y aquí tenemos que repetir lo que hemos escuchado de su boca:
“No aspiro a nada, pero estoy preparado para todo”.
El PRI en Sinaloa tiene un líder y se llama Quirino Ordaz Coppel.
Apenas va en su décimo mes como Gobernador y sus alas lucen llenas de plumas y con garras muy afiladas.
Su canto se ha dejado sentir y ha callado a los que creyeron que podían gritar impunemente en este que es su gallinero.
El tendrá mucho que ver en la selección de candidatos al Senado, Diputados federales, Presidentes Municipales, Diputados locales y la pléyade de Regidores que acompañan a los candidatos a Presidentes.
Por otra parte, se cuece una alianza de facto con el PAS, en lo que corresponde al nivel federal y una coalición por lo que toca a lo estatal y que es donde puede participar legalmente Melesio Cuén y su partido.
En todo tiene que estar Quirino Ordaz si quieren que las cuentas salgan en perfecto orden. Nada se podrá mover o convenir, si no lleva el visto bueno del que mora en el tercer piso de Palacio de Gobierno.
Sabemos que hay una Senaduría que puede estar con nombre y dirección desde estos momentos.
Eso depende de Melesio Cuén Ojeda.
Si quiere ganar sin problemas, ahí está el PRI que jamás se le ha rajado.
No puede llegar al Senado si no lo postula un partido con registro federal.
El PRI le tiene la cuna.
De él depende si quiere que lo arrullen.
Hay una sola candidatura para los aspirantes priistas.
Y son muchos los tiradores.
Hasta mañana.
