Fallo impide que por el momento sea detenido; sin embargo, última decisión es de tribunal colegiado.
El narcotraficante y heredero del Cártel de los Beltrán Leyva, Fausto Isidro Meza Flores, no sólo ha evadido a la justicia mexicana en los diversos operativos que han implementado el Ejército, la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) y la Policía Federal (PF), también se encuentra litigando una orden de aprehensión por el delito de delincuencia organizada en los tribunales de Sinaloa, con el fin de evitar su captura y cualquier persecución en su contra.
Meza Flores, conocido como El Chapo Isidro, considerado por la agencia antidrogas estadounidense, la DEA, como uno de los últimos líderes del Cártel de los Beltrán Leyva obtuvo un amparo contra una orden de aprehensión por el delito de delincuencia organizada que impide que por el momento sea detenido, según documentos públicos de la Judicatura Federal. Actualmente, la resolución se encuentra en manos de un tribunal colegiado de Sinaloa, pero ganó un primer round. Al consultar en la Procuraduría General de la República (PGR) se indicó que se mantienen vigentes otras órdenes en su contra.
El Juzgado Séptimo de Distrito con sede en Los Mochis determinó brindar la protección de la justicia federal a favor de Meza Flores, para que el Juez Sexto de Distrito “deje sin efecto la orden de aprehesión de fecha del 3 de mayo de 2013 dictada en la causa penal 53/2013” y dicte una nueva resolución, la cual puede dejar o no inexistente el mandato judicial. Apenas el 4 de enero pasado, los magistrados tomaron el caso.
El Chapo Isidro se convirtió en férreo enemigo del Cártel de Sinaloa, codirigido por Joaquín Guzmán Loera e Ismael El Mayo Zambada García, luego de la ruptura de Arturo Beltrán Leyva con la federación sinaloense en 2008, debido a la detención de su hermano Alfredo Beltrán, El Mochomo.
Desde entonces el nombre de Meza Flores comenzó a gravitar en enfrentamientos entre células delincuenciales, pero fue hasta 2011 cuando el gobierno de Mario López Valdez (Malova) adjudicó a este grupo criminal una serie de hechos de sangre que incluyó emboscadas a cuerpos policiales y enfrentamientos en el corredor que va de la ciudad de Guamúchil a Guasave y Los Mochis. El gobierno también atribuyó ejecuciones, tiroteos y desapariciones de personas a este clan en Mazatlán y Nayarit.
Pero Meza Flores ha sobrevivido hasta ahora a todas las guerras. La que sostuvo contra el Cártel de Sinaloa, contra las corporaciones policiacas sinaloenses y contra las Fuerzas Armadas. Su grupo fue diezmado a lo largo del sexenio de López Valdez, con varias capturas.
Personajes clave en su organziación fueron cayendo: en 2012 su tío Agustín Flores Apodaca fue arrestado por la Policía Federal, un año más tarde El Chapo y parte de su familia fueron fichados por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Luego fue detenido Ignacio González Peña, su brazo derecho en Guasave. En 2013, la Marina montó un operativo durante una boda en la comunidad de Santa María del Oro, Nayarit. Hubo muertos y heridos, entre ellos el cantante de narcocorridos Remmy Valenzuela, apólogo principal del capo.
En 2014, meses después de la primera captura de Joaquín El Chapo Guzmán en Mazatlán, otro operativo de la Marina que pretendía capturarlo en Guasave y Sinaloa de Leyva arrojó como saldo la muerte de 12 de sus hombres. Las víctimas eran la avanzada. El Chapito logró escapar con un reducido grupo de pistoleros. En 2015, otro de sus tíos, Pánfilo Flores Apodaca, operador financiero del grupo, también fue detenido y más tarde extraditado a una Corte estadounidense.
Ese año se descubrió tras la extradición de El Mochomo, que la organización que dirige Meza Flores colaboraba activamente con el capo desde la prisión de Puente Grande, Jalisco. Según las investigaciones del FBI y la DEA, “Beltrán Leyva daba órdenes desde la cárcel de máxima seguridad a todos sus subordinados, incluyendo a Fausto Isidro. Pero El Chapo Isidro continuó operando”.
El último informe de la DEA
En el informe de la DEA publicado a fines de 2017, ubica a “la organización de El Chapo Isidro como una de las ramificaciones de Los Beltrán Leyva junto con Los Rojos, los Guerreros Unidos y la organización Ruelas Torres, las cuales cuentan con centros de distribución de drogas en Phoenix, Los Ángeles, Chicago y Atlanta”. El texto descata que más allá de que los hermanos Beltrán Leyva están muertos o encarcelados, estos subgrupos mantienen un control fuerte del tráfico de enervantes, lavado de dinero y un uso excesivo de la violencia.
Según la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés), Meza Flores tiene 35 años (junio, 1982), y es el primer hijo de Fausto Isidro Meza Angulo (1964) y Angelina Flores Apodaca. Nació en la Estación Bamoa, Guasave, y de acuerdo con los datos, el poderío de su organización aumentó luego de que en febrero de 2017 elementos de la Semar abatieron a Juan Francisco Patrón Sánchez, El H2, y a Daniel Silva Gárate, El H9.
Con el exterminio de este grupo nayarita, la violencia en el puerto de Mazatlán y en Rosario se detuvo. En el norte, la organización de Meza Flores aprendió la lección. Bajó el nivel de violencia. Según las agencias estadounidenses, desde 2000 comenzó a trabajar para sus antiguos jefes en Guasave, cuando contaba con 18 años, pero en 2008 se dio la ruptura, cuando tenía 26 años.
Se definió por estar del lado de El Barbas, y su poder armamentístico y de reacción obligó a la organización de El Chapo Guzmán a replegarse. Se sabe que el Cártel de Sinaloa nunca pudo tomar Guasave ni Sinaloa de Leyva, bastión de Isidro, pero sí Los Mochis gracias a la campaña que emprendió la Policía Ministerial del estado a cargo del comandante Jesús Antonio Aguilar Íñiguez.
Pero el sexenio de Malova terminó sin cazar la gran pieza que era El Chapo. En cambio, el 25 de agosto de 2017, ya con el priísta Quirino Ordaz Coppel en la gubernatura y con una guerra interna del Cártel de Sinaloa ajena a los Beltrán, los abogados de Fausto Isidro interpusieron una demanda de amparo. El juicio de garantías se extendió hasta que el 1 de diciembre pasado el juez séptimo de Distrito de Los Mochis otorgó el amparo a favor. La última palabra la tendrá el tribunal colegiado.